foto: ecoology.es
La necesidad de contribuir
a la protección el ambiente ha llevado a la industria de la moda a adquirir
métodos que permitan disminuir los impactos que han generado a lo largo de
varias décadas. A medida que iban apareciendo campañas para la protección del
ambiente, por parte de diferentes sectores, el textil no se quedó atrás y
empezó a sustituir materiales sintéticos por orgánicos. Es aquí donde nace lo
que actualmente se conoce como la “Tendencia Eco-Chic” o moda-eco , la misma que busca
además de confeccionar ropa, calzado, accesorios, etc de una forma amigable con
el ambiente, cuidar del personal de producción proporcionándole óptimas
condiciones de trabajo y mejoras salariales, pero sin descuidar las exigencias
del consumidor.
Las industrias textiles son
el primer eslabón en la elaboración de una prenda, ya que de aquí se producen
los tejidos de aquella camisa que llevas puesta. Las empresas con tendencia
ambiental sustituyen por ejemplo algodón o lana artificial por orgánicos;
también tienen implementadas políticas para la reducción de recursos (agua,
electricidad, etc.) o simplemente evitan la utilización de ciertos tipos de
químicos que atentan contra la integridad del ambiente.
Volviendo al punto de la materia
prima, el uso masivo del algodón para la industria textil se ha convertido en
una producción a gran escala para muchas industrias alrededor del mundo,
excepto las que tomaron en cuenta que su cultivo requiere varias exigencias
tales como la utilización excesiva del liquido vital, ya que según datos
emitidos por el manual para el consumo responsable de ropa y complementos por
parte del Departamento de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón (España)
afirman que estimaciones realizadas por la Universidad Twente (Holanda) en
colaboración con la UNESCO-IHE (Institute for Water Education, 2009), que para
producir un kilogramo de tela de algodón se utilizan 11000 litros de agua y
además su proceso de lavado para eliminar impurezas generan considerables cantidades
de residuos grasos que provocan la disminución de oxígeno en el agua. Sumándose
a esto las sustancias tóxicas que se manejan para el cultivo del algodón y
tinturado de telas llegan a 100.000 en
el mercado europeo donde 90% de ellas se las considera perjudiciales para la
salud de quienes fabrican las prendas de vestir, especialmente. Las más
conocidas son: plomo, níquel, arilaminas, cromo, compuestos perfluorados,
alquifenoles, formaldehido, etc.
Los principales materiales que se utilizan para la producción de
prendas de vestir ecológicas son: algodón orgánico, filamentos mezclados de
maíz, lino, seda de soya, fibras de bambú, telas de caucho, fibras de carbón y
madera, lana virgen.
En una siguiente entrada les
mencionaré sobre empresas, marcas o industrias que ya forman parte de ésta tendencia.
Saludos!.
Dani.
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